La península presentan grandes contrastes de paisajes naturales, al tener una vegetación muy variada, que depende tanto del clima como de la composición litológica de las rocas.
A la España húmeda de clima oceánico corresponde la vegetación que necesita abundante agua, con prados naturales y árboles de hoja caduca como el roble, el haya o el castaño.
En la España seca de clima mediterráneo predominan las plantas adaptadas al calor y a las escasas lluvias como encinas, pinos, alcornoques, palmitos….
En Canarias la vegetación está formada sobre todo por matorrales y plantas adaptadas a las escasas precipitaciones también existe una numerosa vegetación endémica en algunas islas como por ejemplo la laurisilva.
En Baleares la vegetación es propia del clima mediterráneo.