El consumo energético en España
El consumo energético español no ha parado de crecer en las últimas décadas, al ritmo del aumento de la calidad de vida. España sigue siendo un país deficitario, es decir, tiene que comprar en el exterior gran parte de la energía que consume.
La politica energética viene marcada por las directrices europeas establecidas en sus planes. Dependemos de otros países a los que les compramos la energía. Esto ha supuesto un condicionante importante para el desarrollo industrial de nuestro país. Los objetivos principales del Estado desde hace años son:
- Incentivar la reducción del consumo de energía , para ello se han establecido diferentes medidas a distintos niveles (subida del precio de las energías, concienciación de la población, fomento del uso del transporte público, la construcción de carriles bici en las ciudades, etc...)
-Potenciar las energías renovables, aún así no alcanza el 10% de la producción nacional. En el año 2009 sólo se conseguía producir el 23% de la energía consumida.
- Asegurar el abastecimiento energético diversificando los países a los que se les compra.
- Evitar el impacto medioambiental negativo en relación a la producción de la erngía así como la de su transporte
Nuestro país, como todos los países ricos, es deficitario en materias primas y en energía. En 2014, el 70% de la energía que consumimos lo compramos a otros países: la energía derivada del petroleo (43% consumo), gas natural (20%) y la mayor parte del carbón (10%). Nuestra producción energética cubre el resto de la demanda, nuclear (13% de lo que consumimos, un 45% de la que producimos) y energía renovables (14% de lo que consumimos 50% de lo que producimos), de donde un 6% es eólica, solar y geotérmica, un 5% es biomasa y biocraburos y un 3% hidráulica.
Proceso de industrialización en España
En España la industrialización fue tarde respecto al resto de los países europeos más punteros, avanzó a golpes, y ha estado muy localizada en sólo algunos puntos del país, dejando otros sin presencia industrial. Actualmente en España poco más del 30% de los trabajadores se dedican a este sector y representa el 16% del PIB español. Importante Llamamos industrialización al proceso por el que una sociedad pasa de tener una economía basada en la agricultura para transformarse en una basada en el desarrollo industrial. Se trata de un proceso largo en el tiempo.
Las etapas del proceso industrializador
La industrialización española fue tarde respecto a la de otros países europeos, dependiente tecnológica y energéticamente del exterior, en todas y cada una de sus fases. Vamos a hacer un rápido recorrido por los 150 años que el proceso industrializador ha vivido en suelo español.
Distinguimos varias fases
a) Los inicios del despegue industrial: el siglo XIX Desde los inicios, España tuvo una fuerte dependencia industrial respecto a los países europeos, ¿Por qué España dependía de otros países?Pordosrazones,nodisponíade capital suficienteacumuladopararealizargrandesinversionesyporotraparte,nocontabacon maquinaria y otros adelantos tecnológicos que le permitieran producir de forma moderna y avanzada. Así que dependía de que empresarios de otros países invirtieran en la creación de industrias y que las compras de maquinaria se hicieran fueran del país. Las primeras industrias que se establecieron pertenecieron a los sectores textil, metalúrgico y siderúrgico, éstos últimos permitieron la construcción de miles de kilómetros de líneas de ferrocarril. La construcción del tren fue de gran importancia para España, por varias razones:
- Creó un sistema de transporte moderno que conectaba a muchos puntos que anteriormente estaban aislados.
- Pero el tendido ferroviario se hizo para cubrir las necesidades de las minas y de las compañías extranjeras que las explotaban, es decir, se trazaban líneas que llevaran desde los yacimientos mineros hasta los puertos. Desde ellos se llevaba el mineral hasta los países (Inglaterra, Bélgica...) que esperaban la llegada de esas materias primas para transformarlas en sus industrias. A la vuelta los barcos volvían cargados de carbón, que escaseaba en España, y esta fuente de energía permitió el desarrollo de la industria siderúrgica en el norte del país (País Vasco, Asturias...). Ya en estas fechas se trazaba el mapa de España en el que se localizaría la industria: Madrid, Cataluña y el País Vasco.
b) El crecimiento industrial hasta la guerra civil. Durante las primeras décadas del siglo XX la industria experimentó un notable crecimiento gracias a varios factores:
- Al fomento de las obras públicas durante la Dictadura de Primo de Rivera.
- A la repatriación de capitales de las colonias americanas (se independizan de España), que se invierten en industria en muchos casos.
- Al estallido de la Primera Guerra Mudial, España como no participa abastece a los países participantes, fabrica productos necesarios para ellos.
- Una política de protección arancelaria, es decir, los productos que viene del exterior de España tienen que pagar muchos impuestos lo que los encarece y hace a los productos españoles más competitivos.
c) La reconstrucción industrial de postguerra La guerra rompió la tendencia anterior, el Estado dedicó importantes esfuerzos sólo a reconstruir un país devastado. Se creó el INE (Instituto Nacional de Industria) en una situación de autarquía (autosuficiencia y aprovechamiento de recursos propios) y aislamiento internacional.
En los años cincuenta la situación cambió porque España ingresó en la ONU y llegaron capitales extranjeros que querían invertir en el país. Se crearon grandes empresas estatales y otras menores con capital privado destinadas a la fabricación de bienes de consumo. Se acentuó el desequilibrio territorial que ya se apuntaba desde los inicios de la industrialización,una industria concentrada en Cataluña, Madrid y la Cornisa cantábrica.
d) El impulso industrializador a partir de los años 60 Durante los años sesenta España vivió una época de desarrollo económico sin precedentes, basado en la llegada de créditos americanos, desarrollo del turismo y apertura de las relaciones internacionales, la implantación de multinacionales, que permitió la importación de energía con cierta facilidad. El Estado franquista incentivó el desarrollo industrial, y creó los llamados polos de desarrollo y promoción en ciudades como Huelva, Córdoba, Granada, Burgos, etc... eran zonas geográficas relativamente reducidas en las que se estimula la localización de actividades industriales para que impulsaran la actividad económica en un área geográfica de mayor amplitud. Huelva fue una de las zonas escogidas en las que se implantó un polo industrial, de carácter químico. Cambió radicalmente el paisaje onubense.
El Seat 600 fue todo un símbolo del desarrollo del país en los años 60. Se fabricaron cientos de miles y se convirtió en un deseado, un producto de consumo para los españoles. Durante estos años se agravaron las diferencias regionales y el desarrollo de la industria se concentró en las regiones que ya tenían tradición industrial: Madrid, Cataluña y el País Vasco, que concentraban las tres cuartas partes de la producción industrial española que contrastaba con la casi ausencia de tejido industrial de la Meseta, Andalucía, Extremadura y Galicia quedaron ésto provocó una importante emigración del campo a las ciudades industrializadas (éxodo rural). Pero a pesar de este impulso, la industria española siguió manteniendo los dos grandes problemas: dependencia exterior tanto energética como tecnológica.
e) Crisis y reestructuración de la industrial: la reconversión La crisis del petróleo de 1973 afectó profundamente a España. La subida del precio del petróleo tuvo importantes consecuencias para la industria española teniendo en cuenta su dependencia energética y tecnológica. Además le afectó intensa y negativamente el proceso de mundialización ya que no era competitiva frente a la industria de otros países. En España además coincide con una complicada coyuntura económica: la muerte de Franco y la transición, momento de inestabilidad política. Se agota el ciclo tecnológico, las industrias se quedan antiguas y se abre una nueva etapa llamada tercera revolución industrial. España no tiene más remedio que reestructurar su industria. Se hace en dos sentidos. El primero en reconvertir la existente, adaptarla a las nuevas exigencias del mercado, modernizarla, hacerla más competitiva, provocó la pérdida de numerosos puestos de trabajo. Y en segundo lugar se apostó por sectores más dinámicos (agroalimentario, químico, y automóvil...) y se reindustrializaron algunas zonas con esta actividades de futuro.
El estado actual de la industria española:
la Tercera Revolución industrial Llamamos tercera revolución industrial a la fase de la industrialización posterior a la reconversión industrial basada en la innovación (aplicación de nuevas tecnologías de la información y la microelectrónica, así cómo los nuevos conocimientos) para la mejora de la producción y gestión industrial. ¿Qué novedades traelatercerarevoluciónindustrial?
1. Desarrolla nuevos sectores industriales como son la automatización de la información (robótica, ofimática, diseño asistido..), la telemática (desarrollo de las telecomunicaciones y la informática), el diseño de instrumentos de precisión , el desarrollo de nuevas energías , etc...
2. Es característico de esta nueva fase la descentralización de la producción , es decir, el largo proceso de producción no está concentrado físicamente en un lugar, esto lo permite la agilidad en las comunicaciones y en el desarrollo de los transportes.
3. Además se ha incorporado la flexibilización productiva, las modas cambian, la demanda de productos también, una empresa tiene que tener preparada su maquinaria para poder reprogramarla y poder comenzar a fabricar otro producto.
4. El tamaño de las empresas es menor , se produce un desarrollo de las medianas y pequeñas empresas (PYMES)
5.Se requiere personal para trabajar en la industria más cualificado ,con más formación ,que en etapas anteriores.
6. La industria necesita de muchos servicios propios de actividades del sector terciario (diseño, estudios de mercado, comercialización, publicidad, contabilidad...), estas actividades son tan importantes como la propia fabricación del producto.
7.Caracteriza a esta fase la deslocalización de las industrias, las fábricas se marchan allí donde se produce más barato.
8.Búsqueda de parques tecnológicos en los que se ofrecen todo tipo de servicios para las industrias de alta tecnología e innovación.
9.Se tienen muy presente para diseñar el proceso de producción las cuestiones relativas al respeto medioambiental en relación a las leyes que el estado exige.
10. Muchas empresas públicas dependientes del estado se privatizan (Telefónica, Campsa, Iberia, Argentaria, etc...), es decir, se les venden a empresas privadas. La presencia estatal es menor en este sector.
En Resumen
Nuestro país tiene un sector industrial pequeño y en decrecimiento. Aunque llegó a suponer el 30% del PIB (1996-2007) desde la crisis del 2008 bajó hasta llegar en 2014 a un 22% del PIB (total del valor de bienes y servicios producidos en país durante un año). Desde los años 80 el sector ocupó en torno a un 40% de la población, pero tras la crisis del 2008, bajó hasta situarse por debajo del 30% en 2014.
Hay cuatro áreas industriales importantes: Cataluña, Madrid, País Vasco y Comunidad Valenciana, y varios núcleos secundarios: Zaragoza, Sevilla, Murcia, Valladolid, Vigo, etc. Se forman dos ejes importantes: el mediterráneo (de Murcia a Cataluña) y el del Ebro (de Cataluña al País Vasco).
Las industrias principales son la siderurgia (norte de España) maquinaria y electrodomésticos (País Vasco, Cataluña y Madrid) Naval (astilleros en Ferrol, Cádiz, Bilbao y Cartagena) automóvil, química, alimentación y alta tecnología (todas ellas dispersas).
La construcción en España de viviendas privadas ha sido el motor de la economía durante los años 1997-2007. Pero cuando estalló la crisis financiera en 2008, las entidades financieras se quedaron sin fondos y dejaron de dar prestamos para comprar casas. Como se dejó de comprar vivienda, se dejó de construir y las empresas del sector despidieron a sus empleados. Esto nos ha llevado a la crisis industrial actual que fue denominada la crisis de la burbuja inmobiliaria.
Uno de los grandes retos de nuestro país es atraer a las empresas a la financiación de secciones de las universidades y escuelas técnicas que puedan hacer el trabajo más cualificado y competitivo. La inversión en I+D+I es esencial.