A pesar de la diversidad, el relieve peninsular también tiene una serie de rasgos que lo caracterizan en conjunto. Estos son la forma maciza, la altitud media elevada y la disposición periférica de relieve peninsular.

Forma maciza. La península ibérica tiene una forma maciza debido a que el contorno de la costa es predominantemente rectilíneo y presenta pocas entalladuras.

Altitud media elevada. Es España con 660 m de altitud media es el segundo país europeo de mayor altitud, después de sil (1300 m). Esta característica se debe, en gran parte, al elevado macizo interior de la meseta. El pico más alto de la península de el Mulhacén, en Sierra Nevada, 3481m. Las tierras por debajo de los 200m de altitud representan menos del 11% del total peninsular.

Disposición periférica del relieve. Las cordilleras periféricas, formada por los montes de León, las cordilleras cantábrica ibérica, y Sierra Morena rodean a la meseta. Éstas, con las cordilleras exteriores: los Pirineos, las cordilleras costero-catalanas, las cordilleras Béticas y el macizo galaico, dan forma a otra de las características del relieve peninsular, su disposición periférica. Esta disposición acentúa los contrastes físicos entre el interior y la periferia ya que las cordilleras periféricas y exteriores han dificultado históricamente la accesibilidad al interior peninsular.