La población mundial se reparte de forma desigual sobre la superficie terrestre. Esto se debe a diversos factores físicos y humanos.

2.1. Factores físicos

Los más importantes para la distribución de la población son el clima, el relieve y el suelo, puesto que condicionan, sobre todo, las grandes zonas despobladas o vacíos demográficos. Sin embargo, estos factores ejercen menos influencia en las sociedades avanzadas, ya que su desarrollo tecnológico permite hacerles frente de una forma más efectiva.

El clima

Los elementos del clima que más directamente influyen en el reparto de la población son el agua y las temperaturas.

.El agua, tanto por su escasez como por su exceso, puede condicionar los asentamientos humanos. La escasez de agua impide el asentamiento permanente de núcleos de población, puesto que dificulta la explotación agrícola, al no poder disponer de riego, y la ganadera, al no existir pastos. La abundancia de humedad y agua -no sólo en forma de precipitaciones-, junto con las elevadas temperaturas, producen vacíos demográficos, como, por ejemplo, en la región ecuatorial.

.Las temperaturas, sobre todo las extremas -excesivamente bajas o excesivamente altas-, pueden limitar el desarrollo de los cultivos y dificultar la vida humana. Por estas razones, ni los desiertos ni las zonas con climas muy fríos son adecuados para el desarrollo normal de las actividades humanas. 

El relieve

Es otro factor físico que condiciona la distribución de la población mundial. Existe un límite de altura, por encima del cual no es posible la vida humana debido a la escasez de oxígeno. La población se localiza, generalmente, en las llanuras costeras y valles fluviales, debido a la facilidad de comunicaciones y a la abundancia de recursos. Por otra parte, las zonas accidentadas y de fuertes pendientes dificultan los asentamientos humanos.

Los suelos

Dentro de un mismo marco geográfico o climático, los núcleos de población se concentran en los suelos más fértiles y aptos para la agricultura, ya que los recursos disponibles les permiten abastecerse más fácilmente. En la actualidad, se pueden evitar o paliar los efectos de estos factores condicionantes en ciertas zonas del planeta, gracias a los avances científicos y técnicos, y a la adaptación de los seres humanos al medio natural.

2.2. Factores humanos

Los factores humanos pueden estudiarse atendiendo a aspectos históricos, políticos y económicos. No son menos importantes que los factores físicos, e incluso, en ocasiones, llegan acondicionar la distribución de la población en mayor medida que aquéllos.

Factores históricos

A lo largo de la historia de la humanidad se han sucedido acontecimientos cuyas consecuencias han sido fundamentales para el crecimiento y la distribución de la población mundial. La existencia de grandes núcleos de población tiene su antecedente en diversos acontecimientos históricos. Por ejemplo, la creación de grandes imperios fértiles en valles fluviales (Egipto, Mesopotamia), que concentraron un gran volumen de población cuando la agricultura era el principal sector económico, responde aun factor de este tipo.

En líneas generales se han producido dos grandes revoluciones demográficas:

1. La Revolución Neolítica, que trajo consigo la aparición de la agricultura, la vida sedentaria, la domesticación de los animales y, sobre todo, el aumento de los recursos alimenticios, factores que se tradujeron en un incremento de la población.
2. La Revolución Industrial, iniciada a finales del siglo XVIII en Gran Bretaña. La tecnología, la maquinaria, los transportes y las nuevas formas de trabajo transformaron radicalmente los modos de vida tradicionales. Durante el siglo XIX se registró un aumento de la población en Europa gracias a los avances logrados en la medicina, las mejores condiciones higiénicas (agua potable, limpieza de vías públicas. ..) y el aumento de la producción agrícola con la introducción de la maquinaria en las labores del campo.

Los grandes trasvases de población han sido originados también por causas históricas diversas: huida de lugares conflictivos; expulsión de sectores de la población (por ejemplo, los judíos); trata de esclavos (despoblación de África hasta comienzos del siglo XIX) y grandes migraciones, sobre todo las intercontinentales de los siglos XIX y xx, provocadas por el espectacular crecimiento de población en Europa, que, desde el Viejo Mundo, se dirigieron hacia América y Oceanía gracias al desarrollo que adquirieron los nuevos medios de transporte: el ferrocarril y la navegación a vapor.

Factores políticos

Son factores originados por las decisiones de los Estados, Gobiernos, Organismos Internacionales, etc. Influyen en la distribución de la población a través de la modificación de fronteras (reunificación de Alemania, separación de India-Pakistán), de guerras (que aumentan el número de muertos, contribuyen al descenso de la natalidad y fomentan el éxodo masivo) y de la creación de nuevos Estados (Israel, Palestina, Ruanda, etcétera).

Factores económicos

Los núcleos de población tienden a concentrarse en zonas de gran riqueza económica o en aquellas áreas que ofrecen buenas perspectivas de vida. Estas zonas han variado según las distintas épocas. En el siglo XIX, los focos de atracción estaban situados en América, Sur África y Australia. Hoy en día, los nuevos focos de atracción se localizan, especialmente, en Europa occidental y en Norteamérica.

Andalucía es una región muy extensa donde es posible encontrar zonas muy pobladas y otras prácticamente vacías. En ambos casos influyen toda una serie de factores tanto físicos como humanos:

1. Casi toda la región goza de un clima benigno (mediterráneo) que favorece el desarrollo de la vida humana, aunque también existen lugares que la dificultan por sus altas temperaturas y tendencia a la aridez, como sucede en algunos sectores de la provincia de Almería.
2. En todo el valle del Guadalquivir predominan los suelos arcillosos que, por ser muy fértiles y estar situados a poca altitud, favorecen el asentamiento humano. Sin embargo, las zonas montañosas que rodean la Depresión del Guadalquivir, como Sierra Morena y las Cordilleras Béticas, son un obstáculo para las actividades humanas (sobre todo agrícolas), por su relieve abrupto y por sus suelos calizos y silíceos.
3. Históricamente, por su situación estratégica, Andalucía ha sido una región muy poblada y por ella han pasado pueblos muy diferentes (fenicios, griegos, romanos, árabes, etcétera).
4. Durante el siglo XVIII recibió un gran aporte humano como consecuencia de las colonizaciones que Carlos III efectuó en Sierra Morena (La Carolina, La Carlota...). La Revolución Industrial apenas tuvo incidencia en esta región, por lo que no afectó al aumento de la población, pero sí se vio favorecida por el desarrollo del comercio.
5. En el siglo xx, la Guerra Civil primero y la emigración de la década de los años sesenta después produjeron un descenso notable de su población.
6. En la última mitad del siglo XX, las áreas de Málaga y Sevilla fueron las que crecieron más rápidamente debido a factores económicos, como el turismo, y la promoción industrial, respectivamente.